El pasado lunes se vivió una jornada llena de angustia y desencanto para los familiares de los siete pescadores desaparecidos luego del naufragio de la lancha Bruma, ocurrido el 30 de marzo frente a las costas de Coronel. Durante una reunión con la Armada, la directora de los bacaladeros del Maule y portavoz de las familias, Claudia Urrutia, informó que en los dos puntos de interés examinados no se hallaron restos de los cuerpos. Sin embargo, en la zona correspondiente a la colisión entre la Bruma y el buque Cobra, se descubrieron restos metálicos evidentes de la estructura de la embarcación artesanal, los cuales mostraban señales de haber sufrido un impacto violento, ya que los fierros estaban retorcidos y cortados.
La vocera, visiblemente emocionada y entre lágrimas, no descartó la posibilidad de que algunos restos de los pescadores se encuentren en el interior del Cobra, a consecuencia del sistema de virado del buque que pudo haber absorbido los restos tras la colisión. “Necesitamos uno, al menos uno”, afirmó Urrutia, quien además instó a trasladar el Cobra a dique seco para realizar una inspección completa de sus compartimentos, enfatizando que “deberían estar dentro del Cobra”.
En un llamamiento directo, la representante solicitó al Presidente Boric que se acerque a reconfortar a estas familias, quienes han demostrado mantenerse correctas en medio de la tragedia. Paralelamente, la Armada presentó nuevos registros que detallaban los daños estructurales en la lancha Bruma. De acuerdo a Urrutia, los restos identificados mediante el sistema UnderDeep corresponden a elementos fundamentales de la embarcación, como la bodega, la sobrequilla, un tubo del mástil y la denominada ‘obra muerta’, todos ellos esparcidos a lo largo de la trayectoria seguida por el Cobra.
Durante la tarde, los familiares están a la espera de un nuevo informe que se entregará con los hallazgos más recientes de las operaciones llevadas a cabo con el buque Cabo de Hornos, lo que podría arrojar mayores avances en la investigación del trágico suceso.
Autor: Jorge Rojas